Guía de audioPetit Trianon
Hacienda reconstruida de Versalles que perteneció a María Antonieta; tiene un château neoclásico y jardines.
Bienvenidos al Petit Trianon, un encantador refugio situado en los vastos terrenos del Palacio de Versalles. Esta elegante finca fue construida entre mil setecientos sesenta y dos y mil setecientos sesenta y ocho bajo la dirección del renombrado arquitecto Ange-Jacques Gabriel. Originalmente encargada por el rey Luis XV, más tarde se convirtió en el apreciado escape privado de la reina María Antonieta, ofreciéndole un oasis relajante lejos de la formalidad de la vida cortesana.
El diseño del Petit Trianon marca una transición del estilo rococó ornamentado al refinado gusto neoclásico de finales del siglo XVIII. Su disposición clara y cuadrada se realza con elegantes columnas corintias y fachadas cuidadosamente dispuestas que enmarcan vistas de jardines encantadores. En el interior, los visitantes son recibidos por una majestuosa escalera y acogedoras salas de recepción llenas de muebles de época. Elementos especiales, como el boudoir, equipado con un innovador mecanismo de espejo móvil, revelan el sofisticado pero cómodo estilo de vida de la corte real francesa.
En el exterior, los jardines combinan la belleza estructurada de la plantación formal francesa con el encanto relajado de los paisajes ingleses. Parterres geométricos y avenidas arboladas contrastan con pintorescas locuras arquitectónicas y elementos rústicos, incluyendo el encantador Caserío de la Reina. Esta pequeña aldea de granjas y jardines permitía a la reina escapar de la estricta etiqueta de la vida cortesana.
Con el paso del tiempo, el Petit Trianon se ha adaptado a cambios trascendentales, incluidos los trastornos de la Revolución Francesa. Los esfuerzos de restauración cuidadosos han preservado su carácter auténtico, asegurando su continuo papel como ventana a la vida real del siglo XVIII. Hoy en día, este íntimo château no solo ofrece una visión del ilustre pasado de Francia, sino que también inspira el arte, la literatura y el cine, convirtiéndolo en una visita obligada para los viajeros deseosos de experimentar una pieza única de la historia.